Ayuno: Isaías 58:1-7
El ayuno es una disciplina muy discutida y muy mal entendida de la fe cristiana. Sin embargo, a pesar de que puede ser un hábito difícil de cultivar, es también una de las disciplinas más reveladoras.
El ayuno – de una manera que es diferente de cualquier otra disciplina – nos revela las cosas que nos controlan. Incluso una comida rápida parcial (por ejemplo, renunciar al consumo total de alimentos entre comidas y después de la cena hasta el desayuno) rápidamente nos hace conscientes de las formas en que los alimentos nos controlan. El ayuno siempre requiere renunciar a algo durante un tiempo – haciendo un sacrificio – y vamos a sentir sus efectos. El propósito de este tipo de ayuno es siempre espiritual. Su propósito es revelarnos las cosas que nos controlan. Cuando se realiza en conjunto con la oración y escuchando a Dios, puede ayudar a recuperar el equilibrio en nuestras vidas.
Lea Isaías 58:1-7.
Contrastar los versículos 1-5 con los versículos 6-7.
Nota la diferencia en el propósito/efecto entre los dos tipos de ayuno.
Lista los elementos en los versículos 6 y 7 que representan mejor el ayuno que el Señor quiere. ¿Qué podría parecer?
El ayuno requiere renunciar a algo, hacer un sacrificio, y en estos versos es un sacrificio por el bien de otra persona. Considera cómo este tipo de ayuno podría tomar forma en tu vida. Acepta el reto de ir más allá al dar albergue para personas sin hogar o hacer una contribución al banco de alimentos local. Da algo para hacer una diferencia en la vida de otra persona.
Sojourners y Peregrinas 