Lectio: Lee el Salmo 80 en varias ocasiones. Al leer:
- Resalta el estribillo repetido en los versículos 3, 7, 14, 19.
- Subraya las preguntas.
- Destaca en un color diferente, las varias peticiones a Dios.
- Encierra en un círculo los nombres y las descripciones utilizadas para “Dios”. Nota la progresión utilizada en el nombre de Dios.
- Lista al lado del texto el tipo de palabras que se usan: alabanza, súplica, pregunta, queja, estribillo. Toma nota de los patrones que emergen.
Meditatio:
Céntrate en las palabras y frases que te hablaron a medida que te sumerges en este Salmo. Repite estas palabras varias veces, grábalas en tu memoria.
Ora las palabras del salmo que hablan de tu situación y de tu comunidad. Reflexiona en estas palabras, dirigiéndolas a Dios como una oración en tu corazón.
Contemplatio:
Deja que estas palabras penetren profundamente en tu alma: Restáuranos, Señor Dios Todopoderoso; haz resplandecer tu rostro sobre nosotros, para que podamos ser salvos.
Guarda silencio ante Dios, y escucha. Sé agradecido.